jueves, 22 de noviembre de 2012

Ya está

No ha hecho ni publicar mi comentario. ¿Por qué? ¿Por qué no ha hecho ni un comentario en mi blog hace tantas entradas? Pasa del tema. Se ha despistado. En otra ocasión tampoco publicó un comentario mío, le hice otro comentario en el que se lo decía y publicó el primero, el segundo no. Quitó la moderación de comentarios, pensé que lo había borrado sin querer y había quitado la moderación para que no le volviera a pasar. Curiosamente, incluso sin moderación de comentarios y habiendo comentado en su blog quien había comentado, no tuvo visitas de anónimos, le respetaron. ¡Qué suerte! Yo tuve que poner la moderación, porque si no, ella no podía entrar en el blog.
Bueno, no soy defensora a ultranza de nada. No me gusta relacionarme con mucha gente porque creo que la gente necesita una cierta dedicación, y doy de sí, lo que doy de sí.
En mi página comenta alguien que, simplemente comenta, no tiene blog. Es un nombre y un comentario, puedes estar más o menos de acuerdo con su comentario. Me encanta poder entablar un cierto diálogo con alguien sobre un tema. Me gusta la forma de afrontar los temas que tiene. Si la entrada no le motiva, no comenta nada y punto.
No tengo que leer su blog y comentar sobre temas que no me motivan en ese momento.
Donde fueres haz lo que vieres. Eso he hecho yo más o menos. Empecé comentando en un blog esporádicamente, no obtuve respuesta en el mío. No me he sentido ofendida. No me siento obligada a leer el suyo, tampoco ha dicho que moleste comentando, ni me ha censurado ningún comentario. No leo siempre ese blog, lo leo muchas veces, pero no siempre. Cuando me apetece y si tengo ganas comento. En absoluto he echado en falta un comentario en el mío por parte del autor del blog. Simplemente el que no comente en el mío me da libertad para no sentirme obligada a nada.
Me motivó otro blog. Un blog provocador. En el que sí parecía que se buscaba, por favor, un comentario. Tanto es así que incluso lo ponía donde hay que comentar. Tanto es así que veía que el autor iba comentando sistemáticamente por muchos blogs. Necesitaba visitas, necesitaba comentarios, esa era la impresión. Comentaba en su blog y después en sus blogs, que empezaron a reproducirse cual setas. Salí mal parada, me dijo que por qué comentaba en su blog, que tenía muchas visitas y que yo le resultaba una pesadilla.
Recibí al poco “la invitación” a un blog que tiene publicidad y parece necesitar muchas visitas y estar en todos los blogs que hay por internet. Escribe bien, pero muy largo y sobre temas que no me motivan. Además, en algunos de sus comentarios resulta un tanto drástico, radical e incluso belicoso, no contra posturas o contra hechos o contra ideas sino contra personas por pertenecer a un grupo… no me motiva ese blog aunque tiene cosas muy buenas.
He visitado otros blogs y el colmo es cuando he visto en alguno que no se permite la entrada a determinadas personas, hay gente que dice que ha expulsado de su blog a tal y tal persona…. Porque han insultado, dicen, creo… no sé,  pero más insultante que poner en el blog de forma constante y permanente que en ese blog tienen la entrada prohibida…. ¡Impresentable! No me interesa esa persona, de hecho veo que es de los que aparece por todos lados. Es raro el blog en el que no comente y además suele ser el primero en comentar.
Recibí en una ocasión una visita con el perfil de google de un tal Angel, creo que tengo su blog, he estado a punto de comentarle alguna vez. Pero él más que comentar el artículo, entró y saludó porque yo había puesto un comentario en un artículo suyo  que estaba publicado en otro blog. Su forma de presentarse me recordó muchísimo a alguien conocido, hasta el punto que creí que podía ser él. No creo.
El caso es que yo de forma sistemática comento en tres blogs.  Mi favorito es uno totalmente personal, con entradas muy cortas, con temas muy simples y muy cotidianos.
No tengo ni idea de si lo que pone es verdad o mentira. No sé si esa persona se corresponde con la fotografía que viene ahí.
Él creó el blog, y entró al mío para presentarlo, fui contenta a responder en su blog. Lo tuvo un poquito abandonado.
Veo que ha estado entrando y dejando mensajes amables en otros blogs, uno de los cuales le suele responderle.
Yo he comentado todas sus entradas, en algunas no he obtenido respuesta.  Alguna no se ha publicado. Se quitó la moderación. Ahora ya está puesta otra vez y no ha publicado mi comentario.
Creé un nuevo Nick porque, entre otras cosas, estaba comentado en blogs en los que, casi todo el mundo pone su foto y dije voy a poner una foto y… al final puse la fotografía de Grace Kelly y de ahí resultó que el blog tomó un color rosa y ha quedado de lo más glamuroso.
Hice una primera entrada espontánea, sobre reciclaje y por arte de magia, alguien lee los blogs, hay espías por internet… obtuve un comentario que me motivó a continuar por ese camino y a seguir investigando sobre el tema. El tema era el reciclaje.
En algún momento me ha apetecido escribir según qué cosas y la verdad que me parecía que ensuciaba de alguna forma el blog que suelo utilizar normalmente e incluso el nuevo, porque ya había tomado unos derroteros de reciclaje. Tan es así que he creado este otro blog en el que cabe todo lo que no va a  ninguna parte.
Y no, no lo va a leer nadie. Si nadie  o casi nadie se ha leído el Quijote, por lo largo, siendo la obra maestra de la literatura española, no hay que ser muy listo para saber que esto que no está escrito por nadie conocido, que no vas a poder presumir con nadie sobre la maravillosa obra que has leído, que no va a abrir los ojos a nadie sobre nada, que está escrito de forma bastante regular. Vamos, que no, que no lo va a leer nadie, porque no se sabe ni de donde viene ni a donde va.
Un blog que no molesta a nadie, no dice nada. Este blog no pretende molestar a nadie. O sea que….
Bueno, que ya hemos terminado, que o aparece mi comentario en su blog o una explicación si se le ha borrado sin querer, o bien, yo ya he terminado de comentar sobre temas que no me interesan especialmente.
Supongo que no valora mucho mis comentarios  si no los publica. Y la verdad, que me echen de otro blog, pues no.
Ya veo que este otro Nick y este otro blog van a hacer que mi blog principal esté más abandonado. Sin embargo, no me importa.
No tengo ganas de ir con mi Nick, dejando comentarios por todos los blogs y esperando, de esta forma que mi blog tenga una amplia difusión.
Sí, me gusta ver que hay gente que ha entrado a leer mi blog, pero no me apetece estar esclava de un montón de blogs y ya, claro, si encima veo que no me publican.
Y sobre todo, veo que en blogs de opinión hay sobre todo hombres, y bueno… no voy a seguir por ahí. Requeriría un análisis, y en este momento no me apetece analizar nada, sólo hablar, sin decir nada en concreto, sin llegar a ninguna conclusión.
No conozco a quien comento, no conozco a quien me comenta. Me gusta que comenten en mi blog y me gusta ver que publican mis comentarios. Cuando en un blog hay moderación de comentarios es casi un honor que te publiquen.
En el mío me sentí obligada a ponerlo porque un anónimo insultaba e insultaba. ¿Por qué ha puesto él moderación de comentarios si no ha tenido comentarios de anónimos?
Justo pone la moderación, ¿y no aparece mi comentario? ¿Soy un hámster en una jaula?, ¿Me están poniendo a prueba?
Hemos terminado.
Lo cierto es que los blogs que me resulta más agradable leer, curiosamente, no  suelen tener comentarios.
El no tener comentarios te da más libertad para escribir lo que quieras. No te obliga a comentar puntualmente temas que tampoco te motivan especialmente en ese momento.
Pero bueno, una no puede evitar ser una sentimental y que le duela que le hagan ese desprecio.
Dicen que no hay más desprecio, que no hacer aprecio. No es verdad. A mí hay gente que no me ha hecho ningún aprecio y no me siento despreciada. Sí, hay blogs en los que he comentado, no han comentado en mi blog y no me siento despreciada, ni dolida.
Me mandaron a la porra de un blog, y sí me dolió. Sin embargo, creo que esa persona estaba abrumada porque le llevaba la contraria. Hacía tiempo que no comentaba en mi blog…. No sólo fue insultante en ese momento, sino que mantiene ahora una frase, donde decía “gracias por comentar” hace tiempo que pone  “si comentas con fundamento, no te llevará el viento”. Sí, todo un caballero. De vez en cuando entro en su blog. No leo sus entradas, pero a veces entro para ver quien sigue comentándole a pesar de saber como es capaz de tratar a la gente.
Bueno, ya está por hoy.

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